El Día PI

Ayer vi el noveno capítulo de Numb3rs, vía Email, ya sabéis...

La cosa es que esta serie me gusta mucho más en inglés que en castellano, tal vez, porque ya la he visto y es como ver lo mismo de otra manera, en otra versión.

Las cosa es que el bueno de Charlie es un auténtico friki de las matemáticas, todo un personaje que parece que en lugar de ver una puesta de sol, ve un fenómeno de refracción de luz, totalmente cuantificable y medible. Mira las cosas siempre desde la perspectiva del cálculo, de la estadística, de la aproximación, y parece que se pierde en la frialdad de los números. Parece menos humano, pero a veces, cuando se pone en entredicho el gusto por las matemáticas, sale con algo mundano, al alcance de la comprensión de todos y que le da un aire más de andar por casa.

En uno de los capítulos explica la relación áurea, que sale en multitud de espirales de la naturaleza, como las cáscaras de los caracoles, por ejemplo. Él lo contaba con alguna característica de una flor.

Estas son ese tipo de cosas que sólo los más expertos saben ver. La dificultad de encontrar la sencillez en lo cotidiano y asociarlo con algo que sólo una pequeña elite conoce.

Eso mismo ocurrió ayer, que era 14 de marzo de 2006. En anglosajón, 03/14/2006.

Y a eso de las 1:59 se produjo el milagro.

Juntando la fecha y hora, tenemos que estamos en el momento:

314159

Es decir, una aproximación de seis cifras del número PI.

Y los hay que lo celebran, oye!

Supongo que hay muchísimas de estas cosas que se nos pasan todos los días, así que quiero aprovechar esta ocasión para reivindicar la aplicación de la ciencia a la vida diaria.

No sólo de matemáticas, sino de cualquier ciencia, que con tonterías curiosas como esta del día PI, hacen que se acerquen al gran público y parezcan más humanas, más interesantes.

Porque, ¿a quién no le gusta descubrir por qué hay que echar el té sobre la leche y no al revés? ¿o cómo afecta la caída desde una altura a un gato?

¿o...?

2 comentarios:

kancerbero dijo...

Uno de los recuerdos más traumáticos de mi época de estudiante de ingeniería, fue el dia en que después de unos cuantos mese rodeado de transformadas de Laplace, análisis en frecuencia, numeros complejos y demás, me di cuenta de que cada vez que alguien mencionaba la palabra "recta" en cualquier tipo de conversación banal, yo la imaginaba mentalmente como:

y = mx + n

Ese día me di cuenta de que no había vuelta atrás.


No tiene demasiado que ver con el post, pero me lo has recordado.

Cabrón.

Gorka dijo...

Hola!

Tiene todo que ver, amigo...

Pero lo peor es cuando te hacen gracia cosas que a los demás les suenan a chino; cuando lo tienes tan dentro que forma parte de tu humor, ahí sí que estás acabado.

Ejemplo:

Existen 10 clases de personas en el mundo, los que entienden el binario y los que no

Es que me troncho...