Nací en el Mediterráneo
Serrat cantó al mar que más se ha navegado en la historia de la humanidad. Hoy, la comunidad mediterránea parece ceñirse a la parte norte del mismo mar.
Cuando se habla de cultura mediterránea o de países mediterráneos se piensa, supongo que inconscientemente, en España, Italia, Grecia. Pocos se acuerdan de Marruecos, Argelia, Túnez o Egipto. Sin mencionar ya casos como Líbano, Libia o Siria...
También se tiende a pensar en islas, sobre todo Sicilia, Mallorca, Chipre, como paradigmas de lo mediterráneo.
Sin olvidar Malta, claro, recordado por todo el país por aquel mítico ya 12-1... aunque no todos sepamos donde ubicarla en el mapa.
Quien sí ha sabido hacerlo ha sido el capitán de un barco pesquero, el Francisco y Catalina, que ha arribado a al isla con la intención de desembarcar a unas 50 personas que pretendían convertirse en inmigrantes ilegales en la unión europea.
Vistas las estrecheces del estrecho y de que para llegar a Canarias hay que adentrarse en las aguas del atlántico, yo también preferiría intentar llegar a Malta desde Túnez, o a Sicilia, no lo sé, al menos las mareas serán más tranquilas y el agua estará más caliente.
La cuestión es que este pesquero encontró a 50 personas que buscaban una vida mejor y se encontraron con que no podía dejarlos en ningún puerto de Malta. La isla se ha negado a dejarles desembarcar.
Tras unos días de incertidumbre, parece que se ha desbloqueado la situación y varios países se van a repartir el problema. Unos se quedan en Malta, otros van a Italia, otros a Andorra, otros a España... y así, que luego cada uno haga internamente lo que sea (repatriarlos, seguro, en el 90% de los casos).
No deja de ser curioso cómo en esta ocasión la labor humanitaria ha quedado por debajo de cuestiones meramente burocráticas. El problema no es cómo recibirles (ayudando, coño!), sino qué hacer con ellos después. Asumirlos como parte de la población del país de acogida, repatriarlos con el coste que conlleva... lo mismo a alguien se le ocurre fusilarlos, total, por una bala... e incluso si logran identificarlos positivamente, pueden enviarle la factura de la bala a la familia... si la hubiere.
Se han visto imágenes muy duras a las que poco a poco nos vamos acostumbrando, lo cual no deja de ser preocupante, en las que se aprecia, con la calidad que puede dar la cámara de fotos de un móvil, cómo estaban hacinados en el interior del barco.
No es tanto como verlos azulados tras ahogarse, pero debieran hacernos empezar a pensar de una puta vez qué está pasando en el mundo para que ocurran hechos así.
Si te rascas cuando te pica, tal vez se te pase, pero seguro que es mejor ponerse un antimosquitos...
2 comentarios:
Muy bien Gorka, ahí ahí haciendo denuncia social, dándonos donde más nos duele a todos los europeos mínimamente acomodados.
Yo creo que la llegada masiva de inmigrantes va a tener consecuencias muy positivas, va hacer que seamos más conscientes de que el estado actual del mundo es insostenible y que se impone pagar la deuda histórica que mantenemos con las colonias.
Por cierto, hoy he oído algo alucinante. Un inmigrante que quiera tener el permiso de residencia en Andorra no puede estar obeso. Por lo visto al entrar te van hacer un cuestionario médico y como no lo pases no entras, chaval. No quieren por lo visto que su sistema sanitario se gaste ni un duro en tí.
Hola!
Bueno, lo de Andorra es comprensible, no? Si por algunos fuera sólo entrarían atletas nacionalizables o modelos de pasarela para puticlubs, no sea que le quite a la niña su ilusión de ser top model.
La vida es así, pero eso no significa que deba ser así.
Al menos el pesquero los recogió, que lo mismo si los deja allí sin decir nada nadie protesta ni nada.
En fin...
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