De aquí, a la eternidad
Ha muerto hoy una gran actriz.
Efectivamente, ha ido de aquí a la eternidad, sólo por una escena que debería quedar para siempre como la más rompedora de la historia...
De esas escenas en las que el cura que vigilaba la sala ponía el sombrero delante del proyector para disfrutar en solitario y al amparo de la oscuridad del cine de su propia lujuria.
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